De nuevo a última
hora y con dudas de como tendría el maltrecho talón derecho de mi pie, me
apunté al V Intramuros Trail Night tras el buen sabor de boca de la pasada edición.
De nuevo una gran
acogida y a pocos días del evento ya se habían agotado las inscripciones para
disfrutar de este bonito trazado la noche del viernes.
A priori el tiempo
iba a acompañarnos, si bien la tarde del viernes se empezó a torcer con unos
nubarrones, que pasó a chubasco, luego a tormenta eléctrica y a “diluvio”.
Chubasquero en ristra
me acerqué hasta la plaza para recoger el dorsal.
Una vez allí y casi
hasta el inicio de la prueba, volvió a caer una importante cantidad de agua que
me pilló en medio del reconocimiento del recorrido. Lo que si me quedó claro es
que el suelo estaba suficientemente mojado como para tener un importante
traspiés. Hoy no sería un día para heroicidades.
Ante las dudas de si
finalmente darían o no la salida, a las 22:00pm y sin arco de salida (por causa
de las lluvias) nos pusimos en marcha.
En esta ocasión me
pilló algo despistado y “mal colocado”, obligando a tener que esquivar
efectivos de camino al Arco de la Estrella para evitar la aglomeración.
Nunca he entendido
como hay gente que a pesar de sus posibilidades (conocidas por ellos mismos),
disfrutan de “estorbar” al resto de participantes colocándose en posiciones
delanteras. Todos tenemos derecho a correr, faltaría más, todos hemos pagado la
inscripción, pero al menos yo en las pruebas en que participo intento valorar
mi nivel ese día, compararlo con el resto de compañeros y en función de ello
situarme en un lugar donde no vaya a molestar a los demás. Cometemos el riesgo,
literal, de ser atropellados, provocar tropezones, etc... Pero bueno, son los
avatares de las carreras.
Nos adentramos por
las calles resbaladizas del casco antiguo. Recorrido muy rompepiernas, con
continuas subidas y bajadas y cambios de ritmo por los cambios de calles.
Intento aprovechar
las subidas, mi “punto fuerte” dado que no me la jugaré en las bajadas, hay más
que perder que de ganar. Pero hoy la máquina está demasiado diésel y me cuesta
coger un buen ritmo. A pesar de ello voy recuperando alguna posición.
Paso por San Blas y
primera liada, no hay nadie en el cruce de la calle Trujillo con calle Sande y
en lugar de seguir recto, me fio del que va por delante y nos subimos por la
calle Sande hacia la Plaza. Al poco otro grupo con un policía indican que nos
hemos equivocado y vamos callejeando buscando la calle San Justo.
Pasando por el Hotel
Don Manuel alguien va contando las posiciones y quiero entenderle 5º, “comorrr!!!”
Paso por la Plaza
Mayor para afrontar las escaleras de nuevo hacia
el Adarve. “Hay muy buen ambiente”.
Al
poco rato, de nuevo liada en la Plaza de Pereros. Allí nos quedamos parados sin
saber que calle tomar, Pereros o San Pablo. Cuando llegó el grupo de atrás,
decidimos que fuera Pereros y seguimos en marcha hasta la Plaza.
De vuelta a casa y
regresa la tormenta eléctrica. Al menos nos ha dejado correr sin lluvia...
Datos de carrera
(mi Garmin):
Distancia: 4,8km – 1 legua (4,59km)
Tiempo de carrera: 20min 56seg
Posición: 7º/500
Ritmo medio: 4:33min/km
Desnivel positivo: 157m
Desnivel negativo: 153m